4 COSAS QUE DEBES SABER ANTES DE PONER UNA FRANQUICIA

Si estás pensando en poner una franquicia o, teniendo ya un negocio te ha surgido la ocasión de ser proveedor de una de ellas, deberías saber algunas cosas antes de embarcarte en esa aventura.En mi caso particular he vivido las dos circunstancias porque fui unos cuantos años proveedor de una de ámbito nacional y, por otro lado, contacté con unas cuantas para ver si se daba la oportunidad de poner algún negocio alternativo por aquello de no tener todos los huevos en la misma cesta.

En la primera circunstancia salí escaldado y en la segunda no llegamos a entendimiento porque yo no veía claro que el franquiciador buscara un win-win.

Poner una franquicia

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Los negocios de franquicia, como todo en la vida, tienen su parte buena y su parte mala.

Cosas a favor

En la parte buena puedo afirmar que

1. el arranque suele ser mejor y mas fácil ya que el modelo, generalmente, ya está probado en unas determinadas circunstancias;
2. te aprovechas del nombre de una marca ya establecida;
3. te enseñan el know-how;
4. te suelen ayudar en los inicios;
5. no tienes que complicarte la vida con todo el tema decoración, cartelería, funcionamiento básico y demás. Cuando esto es por tu cuenta lleva sus quebraderos de cabeza porque al ser algo nuevo, desconoces si funcionará o no.

Cosas en contra

Esto lógicamente no es gratuito. El franquiciador, a cambio, te pedirá

1. una cantidad de dinero por «la fórmula», en concepto de canon de entrada y, en la mayoría de los casos,
2. un canon sobre ventas que realices.
3. pérdida de libertad en tu negocio.
4. lo que hagan los demás franquiciados influirá en tu negocio.

Los negocios de franquicia son de lo más variopinto en cuanto a sectores y cuantía de inversión, desde un McDonalds (con una inversión superior a los 600.000 euros), hasta una pequeña tienda con una inversión de 10.000 euros o menos.

4 cosas a analizar antes de franquiciarse

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 Inversión

1. la cuantía de la inversión. En todo negocio se cumple una máxima. A mayor riesgo, mayor rentabilidad.

Esto quiere decir que no esperes invertir 10.000 euros poniendo una franquicia y que te rente para tí, tu mujer, dos hijos y tres generaciones. Por mucho que te insista el franquiciador. Eso no existe. Si fuera así, a los cuatro días todo el mundo se subiría al carro.

Piensa que en la mayoría de los negocios de franquicia que tienen una inversión baja, lo normal es que te valga para tener un autoempleo. Nada más. Tendrás muchos gastos, como cualquier negocio, y a estos deberás añadirle la parte que se va a llevar el franquiciador.

Barreras de entrada

     2.  valora las barreras de entrada. De una forma sencilla te diré que se conoce como barrera de entrada, las dificultades-obstáculos que tiene un negocio para introducirse en el mercado.

Cuanto menores sean las barreras, más fácil es que el negocio, si funciona, al poco tiempo tenga competidores como champiñones. Esto se da mucho en negocios que se ponen de moda (cigarrillos electrónicos, copias de perfumes, helados de yogures…)

Por ejemplo. A raíz de la prohibición de fumar aparece el cigarrillo electrónico y con él los primeros negocios franquicia para venderlos. ¿cuánto tiempo han tardado en copiar el modelo de negocio? en lo que se presigna un cura loco.

Alguien vió la oportunidad y establece un negocio, pero como es un negocio que no tiene barreras de entrada, en cuatro días aparecen otros cinco competidores. También es cierto que a los cinco meses, la mayoría ya han cerrado. Aquí la cuantía de la inversión también juega un papel importante. Cuanto más barato sea de poner más facilidad para que aparezcan competidores.

Exclusividad

     3. zona de exclusividad lo más amplia posible. Si te funciona bien y la zona da para otro negocio podrás ponerlo tú mismo. Si no tienes exclusividad, la competencia te puede venir de otro franquiciado de tu marca o del propio franquiciador que ponga una él mismo.

Como proveedor no aceptes un contrato de exclusividad. Ya he dicho que en los negocios no es bueno tener todos los huevos en la misma cesta y si te conviertes en proveedor para un sólo cliente, este podrá apretar con los márgenes si sabe que está en una posición dominante y no te permitirá tener la libertad necesaria para poder prescindir de él si el negocio no te resulta lo rentable que tú quisieras.

Dependencia

 4. analiza bien qué porcentaje de dependencia tendrás de la matriz franquiciadora.Esta es la parte oscura que al principio nadie le da importancia. Deberás saber, por ejemplo, si las materias primas te las proporciona él o si tienes libertad para adquirirlas donde tú quieras. Lo normal es que ese nicho del negocio lo tengan controlado de tal forma que estarás obligado a comprar los productos que él quiere, donde él quiere, al precio que él quiere, remodelar el local cuando diga el franquiciador, cambiar mobiliario, decoración… Lo mismo que hace con la parte franquiciada hará con la parte proveedora.

Pongo un ejemplo imaginario. Si pones un «Restaurante Fran Quicia» el franquiciador tendrá controlado todo el negocio de tal forma que las máquinas, mobiliario, decoración, etc… estarán comprometidos con un proveedor a un  precio y el franquiciado no tiene capacidad de adquirirlos en otro sitio a otro proveedor aunque sea el mismo producto y más barato porque el franquiciador gana dinero con ello.

De igual forma los productos que se sirvan ya estarán negociados a quién adquirirlos y a qué precio por el mismo motivo. Pero al proveedor le sucederá lo mismo porque intentará controlarle todo lo que pueda el qué comprar, a quién comprar y a qué precio. Esta es una de las partes negativas de una franquicia. El franquiciado pierde todo margen de libertad de negociación.

Si el franquiciador decide cambiar la imagen corporativa y la decoración de nuestro local, te tocará hacer frente a un desembolso probablemente innecesario pero que a la parte matriz le interesa económicamente.

Tu éxito o fracaso no dependerá sólo de tí

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Al aceptar ser franquiciado, tu éxito o fracaso no va a depender exclusivamente de lo bien que trabajes o gestiones tu propio negocio de franquicia sino que estarás expuesto a lo bien o mal que lo hagan el resto de franquiciados.

El poder de la marca es como un arma de doble filo ya que si un cliente es mal atendido por ejemplo en nuestro imaginario «Restaurante Fran Quicia» de Madrid, al día siguiente estará colgado en internet en un foro donde un fulano habrá escrito»no se os ocurra ir nunca al restaurante Fran Quicia» porque tuve un problema con un camarero…; y tú que te desvives en tu ciudad con tu Restaurante Fran Quicia dando un trato excelente, tendrás que soportar a este fulano y a otros 26 dándole la razón porque también a una prima de uno en Barcelona, le tiraron la bebida encima y blablabla. Es decir, lo que hagan el resto de franquiciados te llegará de rebote para bien o para mal.

Conclusión

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 Si me pides que me moje en dar una opinión te diré que hay muchísimas franquicias. Yo, lógicamente he tratado con unas pocas y la experiencia no me ha resultado todo lo positiva que hubiera deseado y los franquiciados que he podido conocer, la gran mayoría decían el dicho ese de que «antes de meter mucho prometer, después de haber metido nada de lo prometido» y estoy hablando de inversiones que en muchos casos superaban con creces los 400.000 euros.

Si aún así estás decidido, revisa bien el contrato, percibe que el franquiciador quiere ganar él (es legítimo) y que ganes tú (win-win) y por último, intenta contactar con franquiciados que lleven un tiempo. Ellos mejor que nadie te podrán dar una opinión real y certera. Como todo en la vida, habrá franquicias muy buenas y muy malas.

Por último te diré que si te encuentras en la tesitura de si pongo una franquicia o no, y no sabes hacia dónde tirar quizás

la pregunta que debes plantearte es

¿necesito de una franquicia para poner un negocio?

 

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