4 Consejos Para Tomar La Decisión De Una Vez Por Todas De Emprender O No.

¿Estas pensando en emprender, ahora que parece que está de moda?

¿Llevas un tiempo rumiando la idea?

¿Estás ya atorado de tanta información?

¿Has llegado al punto en que no sabes si «buscar chica o ponerte a servir»?

¿no eres capaz de tomar la decisión de una vez por todas??

Tranquilo que en este post te voy a iluminar con

Mis 4 consejos para que tomes la decisión de una vez por todas de emprender

Empezamos

1. No le des muchas vueltas

Te parecerá una contradicción si has leído alguno de mis post pero, créeme, a la hora de emprender un proyecto de negocio, cuánto más claro quieras tener todo, más te vas a ir alejando de empezar.

¿Por qué?

Porque emprender una empresa, al igual que el tomar una decisión de compra, tiene un componente emocional muy fuerte. Por no parecer exagerado y dar el beneficio de la duda, no voy a decir que el 100%. Harward dice que el 90%. Vamos a hacerle caso a Harward.

Cuanto más atado quieras tener todo, más «problemas» vas a ir encontrando en el camino. Entrecomillo problemas por no poner excusas.

Siempre vas a encontrar un «pero» que va a hacer que te eches para atrás.

Dicen que tomar la decisión de casarse es una cuestión emocional, y estoy totalmente de acuerdo.

Si decidir casarnos lo hiciéramos racionalmente, estoy convencido que nadie se casaba.

Pues tomar la decisión de casarse  y emprender, no difiere mucho.

 

2. Fórmate en ventas

¿Vas a montar una empresa y eres de los que se consideran nulo para vender?

Pues, 2 opciones tienes

1. Ni se te ocurra montar nada. Casi me atrevería a decir que uno de los grandes problemas que afectan a la mayoría de las empresas que acaban cerrando es que «no saben vender». y dicen que

SI NO SABES VENDER, ES MEJOR NO  EMPRENDER

la frase no es mía. Es el título de un libro de Jurgen Klaric (no soy tan ingenioso)

2. Aprende a vender.Vender es complicado y soy de los que opina que un vendedor, al                 igual que un médico o un futbolista, no nace. Se hace. Las personas tenemos talento y           aptitudes para determinadas cosas que nos pueden predisponer y ayudar a                                 desarrollarlas. Pero todo se aprende. Igual que un médico estudia medicina, un                         vendedor tiene que aprender a vender. Y si vas a tener una empresa, con más motivo.           No es excusa decir o pensar que «yo para eso no valgo». Si no vales, haces que valgas             porque si no lo único que te espera es cerrar. Una empresa es complicado y difícil                     sacar adelante, luego, cuantas menos oportunidades le demos a la mala fortuna,                     mejor.

3. Tú no tienes una idea extraordinaria

Es curioso que cuando uno piensa en emprender, parece como que tiene que ser porque tenemos una idea genial, revolucionaria…vamos, poco menos que no existe.

Haz una prueba. Escribe en Google «emprender» y clicka en «imágenes». En los resultados vas a ver la cantidad de imágenes que relacionan «emprender» con el concepto de «idea» plasmándolo en el dibujito de una bombilla en la cabeza o similar ( al estilo dibujo animado cuando tienen una idea)

¿Eres de los que creen que tienen una idea de negocio que a nadie se le ha ocurrido?

¿que te vas a llevar el mercado de calle?

¿que tu idea extraordinaria va a revolucionar el mundo?

Aterriza.

O date una vuelta por Google y googlea tu idea de negocio.

Hoy en día está todo inventado, o casi.

La estupenda idea que se te ha ocurrido, y que guardas como el secreto del Arcano y no se lo dices a nadie «no sea que te la copien», ya se le ocurrió antes a alguien. A un paisano de Nebraska, o de Tegucigalpa o a tres en Tanzania.

Si tu idea de emprender es ofrecer un novedoso producto o servicio, yo que tú me lo pensaba dos veces y te voy a contar el por qué.

Si tu producto o servicio es nuevo, tendrás que hacer un esfuerzo económico titánico para que

• el mercado lo conozca
• el consumidor aprenda para qué sirve
• cómo se utiliza
• qué ventajas tiene
• en qué le puede ayudar etc…

Hay varias formas de encaminar esto

1. Teniendo una cuenta corriente de varios millones de dólares para llevar a cabo todo lo anterior o
2. Buscar socios que los tengan.

No hay más.

Apple invierte 2 billones de dólares en cada producto que desarrolla y lanza. Y es Apple, que es conocida y reconocida.

Imagínate tú lo que te supondría introducir un producto o servicio «único e inexistente» en el mercado.

De ahí que las ideas de negocio al final acaban siendo una copia de algo que ya funciona en otro sitio, convenientemente adaptado a tu mercado, o una evolución de otra ya existente.

Aunque no voy a ser yo quien te quite la idea, si quieres intentarlo.

¿por qué crees que las empresas que invierten en I+D son empresas potentes? porque tienen la pasta para ello. Talleres Pepe, no se lo puede permitir y se conformará cuando Monroe, Bosch, Michelín o quien sea, se haya gastado un dineral en crear algo para que Pepe lo adapte a su negocio.

4. Las «W» del emprendedor

Este último consejo es de cosecha propia. Ya lo he comentado alguna vez, pero no está de más recordarlo

Antes de emprender, haz examen de conciencia y pregunta y respóndete con la mayor sinceridad posible lo que yo he denominado «el test de las W del emprendedor»

Para qué (for What?) quiero emprender un negocio?

Por qué (Why?) quiero emprender un negocio?

Con qué (whit What?) quiero emprender un negocio?

Con quién (whit Whom?) quiero emprender un negocio?

Conclusión

• Una vez respondido y vistos pros y contras,
• siendo consciente de que 9 de cada 10 empresas cierran,
•  y analizado (recuerda el punto 1) todo lo anterior que te he dicho
• todavía te quedan ganas,

¡¡adelante y bienvenido¡¡